Tema: El susurro de Dios en medio de la confusión.
- Introducción
Bienvenidos a 40 días de gracia. Hoy, nos encontramos con la división que Jesús provoca entre quienes lo escuchan. ¿Quién es Jesús para ti? ¿Cómo reaccionamos ante la verdad de Jesús? ¿Estamos dispuestos a cuestionar nuestras propias creencias? ¡Acompáñanos en esta reflexión sobre la decisión y la verdad!
- Oración inicial
Te pedimos, Señor, que tu acción misericordiosa mueva nuestros corazones, ya que sin tu ayuda no podemos complacerte. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
- Reflexión del Evangelio
«¿Acaso de Galilea va a venir el Mesías? ¿No dice la Escritura que el Mesías vendrá del linaje de David?» (Jn 7,41-42).
El Evangelio de hoy nos muestra cómo la identidad de Jesús generaba confusión y división. Mientras algunos lo reconocían como el enviado de Dios, otros lo rechazaban por prejuicios y falsas certezas. ¿No es este el reflejo de nuestras vidas? Efectivamente, esta escena expresa lo que sigue ocurriendo hoy: cuando Cristo entra en nuestra vida, nos interpela y nos invita a decidir.
Asimismo, la figura de Nicodemo nos enseña a buscar la verdad, incluso cuando el ambiente es hostil. Sus palabras son un llamado a la justicia: «¿Acaso nuestra ley juzga a un hombre sin antes escucharlo?» (Jn 7,51). Esta pregunta resuena en nuestras conciencias: ¿Somos capaces de juzgar con justicia, de escuchar la voz del Espíritu antes de emitir un juicio?
Por ello, el presente requiere acciones y testimonios cristianos; es urgente dar a conocer a Jesús, porque la ignorancia es uno de los enemigos más poderosos de Dios en la familia y en la humanidad. Hoy, muchas personas no pueden precisar la verdadera identidad de Jesús y, en sus búsquedas, realizan construcciones ideológicas alejadas de las enseñanzas del Maestro, explorando territorios de oscuridad.
San Agustín decía: “Temes perder lo que amas, pero no amas lo que deberías buscar”. Piensa en cuántas veces hemos resistido el llamado de Dios por miedo al cambio. ¿En qué aspectos de tu vida te cuesta aceptar a Cristo plenamente? ¿Cuántas veces hemos preferido la comodidad de nuestras creencias a la verdad que nos desafía? Hoy, el Señor nos invita a superar nuestras dudas y abrazar su presencia con un corazón sincero.
- Propósitos
Jesús sigue siendo signo de contradicción en nuestro tiempo. Hoy podemos dar pasos concretos para acercarnos más a Él y reconocerlo en nuestra vida:
- Reflexiona sobre las ideas o actitudes que te impiden recibir plenamente a Cristo.
- Escucha sin prejuicios la voz de Dios en su Palabra y en quienes te rodean, y no tengas miedo de defender la verdad, incluso cuando enfrentes oposición.
- Haz una obra de misericordia, acogiendo a alguien que piense diferente a ti.
La verdad de Cristo nos transforma cuando abrimos el corazón. Anímate a compartir estos propósitos con alguien más y acompáñense mutuamente en este camino.
- Oración final
«Jamás ha hablado nadie como ese hombre» (Jn 7,28).
Señor, abre nuestros corazones a tu verdad. Danos humildad para reconocer tu voz y valentía para seguirte sin miedo. Que en esta Cuaresma dejemos atrás las dudas y te recibamos con confianza. Haznos testigos de tu amor, para que, con nuestras vidas, proclamemos que solo en ti encontramos plenitud. Amén.
- Cierre
«¿Acaso de Galilea va a venir el Mesías?» (Jn 7,41).
Jesús siempre nos desafía a decidirnos por Él. ¿Qué respuesta darás hoy?
Nos vemos mañana en 40 días de gracia.